Uno de los aperitivos más típicos de Málaga son las conchas finas al natural. Tomarlas con unas gotas de zumo de limón y un poco de pimienta blanca recién molida es una delicia a la que pocas personas amantes del marisco se pueden resistir.
En esta entrada os voy a explicar cómo limpiamos las conchas finas para disfrutar de este plato. Lo que sí quiero recalcar es que es imprescindible que las conchas finas sean lo más frescas posible. Ahí está la clave del éxito de esta receta.
Ingredientes:
Conchas finas (normalmente 3 por comensal)
1 limón
Pimienta blanca recién molida
Comenzamos abriendo la concha fina introduciendo un cuchillo de hoja ancha y llegando hasta el fondo para que se abra y se separen las dos conchas.
En el centro tiene una bolsa con arena y suciedad. Con la ayuda de una puntilla la cortamos y retiramos. Tras esa parte encontraremos una especie de "telilla" que también debemos quitar tal y como veis en la imagen.
Pasamos a lavarla bien bajo el grifo y ya solo nos queda separar toda la carne de la concha fina con la puntilla.
Vamos colocando las conchas en un plato. Si no las vamos a servir en el momento os recomiendo que las guardéis en frío.
Tal y como he comentado al comienzo de la receta, las servimos con limón y pimienta blanca.
¡A disfrutarlas!!!
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