El guisillo de huevo o conocido popularmente como guisillo huevo es un plato tradicional de Archidona, pueblo malagueño situado en el centro la Comarca Nororiental de la provincia de Málaga. Este plato también es conocido como Guisillo de San José pero no debemos confundirlo con la cazuela homónima típica de Villanueva del Trabuco ya que no es exactamente igual. Otra cazuela con muchas similitudes la encontramos en Alfarnate y es la denominada cazuela de papaveotes.
Como ambos platos ya están publicados en el blog, os dejo los enlaces por si queréis recordar las recetas:
Con respecto al guisillo huevo es interesante comprobar la simplicidad de la receta en la básicamente el protagonista es el pan que se va quedando de días anteriores. No os dejéis llevar por las apariencias porque se trata de un plato muy reconfortante y curiosamente hay quien lo toma si se encuentra mal del estómago ya que asienta bastante el cuerpo.
Tengo que decir que la receta tradicional se hace con agua pero a mi me gusta hacerlo con caldo de pollo para que tenga un poco más de "sustancia".
Ingredientes:
1 rebanada de pan cateto asentao
6 dientes de ajo
1 litro de caldo de pollo
Un pellizco de azafrán en hebras
1 limón
Para las tortillitas:
5 huevos
3 dientes de ajo
Una ramita de perejil
Azafrán en polvo o un sobrecito de colorante alimentario
Un pellizco de sal
Pan rallado
Aceite de oliva virgen extra suave para freír
Comenzamos friendo la rebanada de pan cateto junto con los 6 dientes de ajo. Los pasamos al mortero y hacemos un majaíllo.
En una cacerola ponemos el caldo de pollo y agregamos un pellizco de azafrán en hebras. Llevamos a ebullición.
Añadimos nuestro majaíllo y un buen chorreón de zumo de limón.
Dejamos hervir un par de minutos y apartamos.
Pasamos a hacer las tortillitas. Para ello batimos los 5 huevos en un cuenco. Añadimos los 3 dientes de ajo y el perejil muy finamente picados junto con un pellizco de sal y el azafrán en polvo.
Vamos agregando cucharadas de pan rallado hasta que obtengamos una masa que no quede ni muy blanda ni excesivamente dura.
Calentamos el aceite en un cazo y vamos friendo las tortillitas echando la masa con la ayuda de una cucharilla.
Cuando tengamos todas las tortillitas fritas las incorporamos a la sopa.
Damos un hervor de un minuto y apartamos.
Probamos para rectificar de sal o de zumo de limón al gusto.
Servimos calentito y... ¡A disfrutarlo!!!
Ana,me acabo de comprar tu libro!!!
ResponderEliminarEstoy fritita por leerlo!!!!
Qué bien Montse! Muchas gracias guapa, espero que te guste y disfrutes con todas las recetas. Un beso!
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