La gamba cristal es un marisco que se pesca desde hace relativamente poco tiempo. En un principio no tenía mucho valor culinario ya que se pensaba que eran los alevines de la famosa gamba blanca andaluza.
La "culpa" de su descubrimiento la tiene el agotamiento de los caladeros de pesca de mariscos ya que hizo que se le prestara especial interés.
Esta variedad de gamba no es un alevín como se pensaba al principio, sino ya es una especie adulta que conserva su pequeño tamaño durante toda su vida. El hecho del color transparente de su piel y la carne blanca viene propiciado por las profundidades en las que habita donde no llega a luz del sol.
Conocida por todos como gamba blanca o camarón blanco, poco a poco se está convirtiendo en uno de los mariscos más apreciados en gastronomía por el sabor dulce de su carne y la infinidad de recetas que se pueden elaborar con ella.
Cabe destacar que se comen en su totalidad, la cáscara es tan fina que permite que las consumamos sin pelar. En esta receta os voy a explicar cómo hacerlas fritas pero os recomiendo que las probéis en muchos de los platos que quedan perfectas como por ejemplo, en tortillitas al igual que se hacen las tortillitas de camarones.
Como siempre que necesito una materia prima excelente, todo lo compro en mi Pescadería Victoriana situada en El Rincón de la Victoria, Avenida del Mediterráneo, nº 147. Os recomiendo que le hagáis una visita porque su mostrador es una auténtico espectáculo para todos los que amamos el buen género y la calidad.
Mostrador general |
Boquerones de la Caleta de Vélez |
Calamares, lubinas y lenguados |
Langostinos frescos de Sanlúcar |
Gambas blancas y cigarras frescas |
Ingredientes (para 6 personas):
1/2 kilo de gambas cristal
Harina especial para frituras (semolosa de trigo)
Aceite de oliva suave para frituras o aceite de girasol
Sal
1 huevo por comensal
Comenzamos lavando bien nuestras gambas bajo el grifo. Hay que hacerlo con cuidado porque son delicadas y se pueden romper.
Las escurrimos bien y sazonamos.
Seguidamente las pasamos por la harina y quitamos el exceso con la ayuda de un cernidor.
Calentamos bien el aceite y las vamos friendo en pequeñas tandas.
No la remováis en exceso con la espumadera, hay que dejarlas para que no se les caiga la harina y queden bien fritas y crujientes.
En último lugar, las ponemos en un plato con papel de cocina para quitarles el exceso de grasa.
En una sartén aparte, freímos un huevo para cada comensal.
Servimos las gambas con los huevos y... ¡A disfrutarlas!
Este plato admite como acompañamiento una buena ensaladilla de pimientos asados.
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Fritura de chanquetes con asadillo |
Estas gambas son deliciosas y con el puntito que se puede comer la cabeza, no es tan dura como la otras. Me encanta el recetario que tienes aquí en tu blog, soy de cordoba, cocinero y residiendo provisionalmente en Málaga.
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